Esta increíble residencia se encuentra en una pintoresca isla del estado de Washington, EE. UU. Y nos parece que este es el sueño de cualquiera que quisiera vivir fuera de la ciudad: su propio muelle, acogedores miradores y una casa rodeada de bosques. A pesar del uso de materiales clásicos, madera y piedra, el arquitecto logró crear un aspecto muy moderno: todo gracias a una geometría simple y enormes ventanales. En la terraza, los propietarios equiparon una estufa y parrilla, así como un área acogedora con chimenea, para que las salchichas o malvaviscos se puedan asar al fuego por las noches. Y nos enamoramos del baño con vista al bosque: qué agradable es tomar el sol en el agua tibia y observar la naturaleza. Quizás, solo una casa junto a un lago junto a un bosque puede ser mejor que una casa de campo.!
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