En esta casa conmovedora en algún lugar del interior de la región española de Cantabria, se recoge lo mejor del estilo rústico. Aquí, hay una piedra en bruto con vigas de madera en la decoración y delicados muebles envejecidos en agradables colores cálidos, una gran sala de estar con grandes ventanales y acogedoras habitaciones. Y en esta casa vive la familia de viajeros que, tras un largo periodo de vagabundeos, decidieron echar raíces y asentarse finalmente en una finca de 300 años en el norte de España, que ellos mismos habían restaurado. Idilio!